domingo, 26 de diciembre de 2010

En busca de las tumbas perdidas

Hoy, Carmen, Victor y yo hemos hecho una búsqueda peculiar. Las tumbas visigodas de Naveros.

Naveros, pedania de Vejer


Partimos a las 10 de la mañana de Chiclana, hacia el Pago del Humo, ya que toda la ruta la ibamos a hacer por asfalto. Nos llevamos una sorpresa, al encontrarnos con un carril bici que discurre al margen del rio Iro. ¡La estrenamos, por supuesto!


Un carril bici excelente, de doble sentido, que nos llevaria al Pabellón Ciudad de Chiclana, donde continua hacia Pelagatos. En la rotonda la abandonamos, para proseguir hacia el pago del humo, pero observamos que sigue por el parque que hay en el poligono industrial.

 
+1 point para Chiclana, que nos ha evitado un buen tramo de carretera, y que ha tenido una muy buena iniciativa. No cai en ese momento, pero podiamos haber evitado también el puente que atraviesa la autovia y todo, si hubisemos seguido el carril bici y llegado hasta la rotonda de Polanco, donde hubieramos entrado por el camino que discurre a los pies del Cerro de Ñaña y llegariamos al Pago del Humo sin tanto coche. La próxima vez lo haremos asi.


Bueno, pues avanzamos por el Pago del Humo, donde paramos a tomar un café en una de las ventas, y renaudamos la marcha. El dia se presentaba excelente, muy soleado, con un paisaje verde ¡Un gustazo! Y más cuando llegas al punto más alto, en el que una vez superado vas descendiendo hasta Naveros casi sin pedalear. Me encanta esta travesia.


Llegamos tranquilamente a la pedania de Vejer, donde pasamos un buen rato en la Venta los Naveros degustando una buena tapa de venado y cerveza. Y el precio, inmejorable. ¡2,50 €! Me encanta esta pedania.


Ahora tocaba investigar. Nos dirigimos al Cordel de los Marchantes, donde parece que existen algunas tumbas de origen visigodo. Ya es conocido en Naveros el Conjunto Rupestre de los Banquetillos, donde se encuentran una serie de tumbas antropomorfas de la Edad de Bronce, pero las tumbas visigodas es poco conocido. Y guiandome por lo que me comentó Mr. Jenkins en las jornadas de Patrimonio y Economia, empezamos la búsqueda de las tumbas perdidas.

Foto de Carmen, de oBirds

Pude hablar con un hombre muy amable que estaba en la cañada, el cual me comentó que por alli habian encontrado restos humanos, pero que poco quedaba ya. Me indicó el lugar, y los tres fuimos a buscar, entre los montes.


No tuvimos suerte. Rebuscamos en lo mas alto del cerro, observamos cada zona de roca desnuda que aparecia entre la vegetación....y nada. Lo intentamos en los montes colindantes, y tampoco logramos encontrarlo. Quizás malinterpreté las indicaciones de Mr. Jenkins, o no tuvimos la suerte de hallar el lugar correcto.
Pero no importa. Nos divertimos pateando el monte, con un dia buenisimo que parecia primavera.


Volvimos a Naveros, donde repetimos sesión de tapas (esta vez de ternera), un cafelito, y de vuelta a Chiclana, disfrutando de los hermosos paisajes de monte tan cercano a nuestro hogar.


¡Ah! Algo que no podemos obviar en esta ruta. No hace falta irse a la sierra para ver alcornoques. Tenemos el privilegio de tenerlos muy cerca, el último reducto de los alcornoques que ocupaban antaño la Bahia de Cádiz, los alcornocales costeros.


La ruta de Naveros por la carretera, de 45 kilómetros ida y vuelta, es muy amena y divertida, ideal para épocas de lluvia en las que los caminos de tierra se hacen intransitables.


Aunque no logramos el objetivo, nos lo pasamos muy bien. Escribiré un correo a Mr. Jenkins, para ver si me puede ayudar y mandarme la localización exacta de dichas tumbas, para volver a intentarlo otro dia. Por cierto, aqui teneis la jornada en el blog de Carmen:


Y aqui teneis la ruta, por si quereis realizarla.

Ver En busca de las tumbas perdidas en un mapa más grande

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