Continuamos con la segunda parte de la ruta, que combina dos de las rutas de Bicimetro (haz click aquí si quieres ver la primera parte, que corresponde al Jardín del Turia).
La segunda parte de la ruta seria la correspondiente a la ruta
propuesta por Bicimetro, La Fachada Marítima, donde visitaremos el puerto de Valencia, el paseo marítimo y el barranco de Carraixet, entre los huertos de Alboraya.
Estábamos por el final del Jardín del Turia, a la altura del Oceanografic. Es aquí donde salimos del parque, por el Puente del Grao, para acceder al carril bici de la Calle de Menorca.
Siguiendo el carril bici, observaremos que cambia de color, de rojo a verde. Llegará un momento en el que dicho carril bici se desvíe a la derecha. Seguimos esa dirección, ya que nos lleva al puerto de Valencia, uno de los destinos elegidos en la ruta.
En los alrededores del puerto, nos encontramos con un evento deportivo. ¡Al llegar allí, nos invitaron a un zumo! De categoría, jeje.
Es difícil perderse. Siguiendo el carril bici, llegamos fácilmente al puerto de Valencia, donde paramos a descansar y almorzar.
¡Llegamos a la costa! Salimos del puerto para entrar en el paseo marítimo, caminando por la acera, y entramos al carril bici que discurre por allí. El mar, como un plato...¡totalmente en calma, como si fuera un gran lago!. Sin mareas, sin olas...muy distinto a nuestras playas de Cádiz. Como se nota que estamos en el Mediterráneo.
Pedaleamos por el amplio carril bici, junto a la Playa de las Arenas. Por todo el paseo, encontraremos muchas "terracicas", bares, etc. Llegado a la playa de Malvarrosa, nos paramos un momento para ver la "casita" del conocido escritor Vicente Blasco Ibáñez. ¡Menudo chalercito que tenia el gachón!.
Proseguimos hacia el paseo marítimo de La Patacona. Este lugar era un barrio de pescadores, donde podremos encontrar algunas de sus casas, de principios del siglo XX. Este lugar me recuerda al Bajo Guía de Sanlúcar de Barrameda, en Cádiz. De hecho, ambos barrios datan de la misma época.
Estamos dentro del término municipal de Alboraya. Seguimos por un carril bici que nos encontramos más adelante, donde hay cantidad de restaurantes y bares de copas. Más adelante, cruzaremos la desembocadura de la acequia de Vera, y llegaremos al camping de Alboraya, donde se termina el carril bici. Junto a dicho camping, hay un carril de tierra, que seguimos para llegar a la Ermita dels Peixets.
En tan sólo unos metros, pasamos de la ciudad al campo. Mola.
Llegamos a la ermita. Lamentablemente, no hice la parada que quería realizar allí, para observar mejor el edificio y tomar alguna foto, ya que había personal "no grata", y nos fuimos de allí tan rápido como pudimos, a la izquierda por el paso inferior a la autovía. Este paso da a la última parte de la ruta, el paseo del Barranco de Carraixet.
He de reconocer que no me esperaba gran cosa de esta parte de la ruta. Había leído que nos encontraríamos mucha basurilla por allí, y que se podía ver algunas aves, pero imaginé que seria solamente algún pato o gaviota extraviada y poco más. Me alegro de haberme equivocado.
Este camino, cortado al tráfico, discurre al lado del Barranco de Carraixet, un cauce que recoge aguas de la Sierra Calderona. Podemos ver en dicho cauce un buen carrizal y buena presencia de plantas acuáticas, perfecto para que determinadas aves puedan alimentarse y criar allí. Es el ejemplo de las fochas, que estaban preparando sus nidos.
Pero no sólo había fochas allí. También pudimos ver calamones, gaviotas cabecinegras, reidoras, patiamarillas, patos azulones, mosquiteros, pechiazul, garcetas, gallinetas, etc. ¡Incluso un ganso!
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| Ganso en su "posadero" |
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| Calamón |
Además, el paisaje está genial. Nos encontramos entre las huertas de Alboraya, donde aún podemos ver algunas típicas edificaciones como son las barracas, construcciones con tejado de paja a dos aguas, muy representativas de la huerta valenciana.
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| La Barraca Valenciana |
Y es que, estos son los lugares que realmente nos gustan, cuando estamos por el campo. Estuvimos bastante tiempo por allí, disfrutando de los alrededores y observando al cauce que, "pajarilmente" hablando, daba bastante de sí. Y tanto. Nos encontramos con una garcilla cangrejera (la que me costó ver hasta que se posó en un lugar de color distinto al de su plumaje, ya que se camufla perfectamente en el carrizal) y un especie que no había visto antes Carmen: La polluela pintoja. Un "bimbo" jeje. Vaya día más completo.
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| Garceta común y garcilla cangrejera |
Seguimos el carril bici hacia la izquierda, para llegar a Alboraya. Vaya sorpresitas que tiene la población. Además de ser conocida por la plantación de la chufa (planta de la que se realiza la horchata), se pueden realizar unas rutas interesantes por sus huertas y por el barranco de Carraixet. Y no sólo eso. El carril bici por el que estábamos pedaleando es la Vía Verde de Xurra. Genial. Otra ruta que haremos próximamente.
Recorrimos la población por el carril bici, para acceder al carril bici de la periferia de Valencia. Pero antes hicimos una parada, ya que vimos un puente histórico. El Puente del Moro. Dicho puente, de estilo románico, tenia su emplazamiento original en la acequia de Vera.
Una vez visto el puente, llegamos al carril bici de la periferia de Valencia, el cual seguimos para llegar hasta Burjassot y a casa, finalizando la jornada.
Un día completo, una ruta sencillita, circular de 35 kilómetros, sin pendientes, en el que hemos estado en la capital valenciana recorriéndolo de oeste a este, paseando por la playa y vuelta por el campo, con observación de aves incluido (para inmensa felicidad de Carmen, jeje). Seguiremos realizando las rutas de Bicimetro, que son muy interesantes.
La ruta la podéis visualizar y descargar desde Wikiloc y bikemap.
Hola, no sé si seguís viviendo en Valencia, pero si te gustan las aves y la bici, si sigues la Vía Xurra hasta Puzol puedes visitar la Marjal del Moro. Una vez llegas a Puzol te desvías hacia la playa y en nada llegas a la marjal, que está protegida y tiene avistaderos preparados para los amantes de los pájaros.
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